Me miras. Te observo de reojo. Me intentas consumir. Te aparto. Sonríes. Te ignoro. Me intentas aspirar. Sonrío. Te derrumbas. Sonrio. Se te cae la primera lagrima de cocodrilo. Te miro. Me ignoras. Te toco. Me soplas. Vuelo.
Si pudiera hablarle a mi inocencia le diría que me encanta su forma de ver el mundo.
miércoles, 2 de junio de 2010
Eres todo lo que pedía, lo que mi alma vacía quería sentir. Eres lo que tanto esperaba, lo que en sueños buscaba. Regálame unos segundos de felicidad a tu lado. Hazme rehén de tus brazos, presiona suavemente tus labios con los míos. Soy tuya.